Laicos donaron retiro de la misericordia a sacerdotes

El señor Cardenal Rubén Salazar Gómez,  arzobispo de Bogotá, primado de Colombia y presidente del CELAM, al inicio del retiro, mandó un mensaje a todos los participantes de este encuentro.

Escuchémoslo a continuación:

Así mismo, el Nuncio apostólico de su santidad en Colombia Ettore Balestrero, también se dirigió a los participantes con estas palabras a continuación:

Este retiro de la misericordia, hospital de campo, fue volver a nacer, como hombres renovados, nuevos, llenos de la misericordia y del amor de Dios, para poder perdonar, para poder auxiliar  a quienes llegan heridos, con hemorragias en sus almas, en busca de ser escuchados, sanados, absueltos de todo pecado, a través del sacramento de la reconciliación.

Recordemos que al inicio de su pontificado, el Papa Francisco les dijo a 3.000 sacerdotes de su diócesis, refiriéndose a la confesión, que la Iglesia debería ser como un "Hospital de Campaña", un Hospital de Campo, donde los heridos llegan buscando primeros auxilios para el alma”.

La única condición para asistir a este retiro espiritual para los sacerdotes, fue  reconocerse necesitados de Misericordia. “Si te sientes débil, cansado, herido, sediento, sólo debes abandonar tu propia resistencia a abandonarte y pedir Misericordia. Él sólo quiere que le demos nuestro fíat para salir amoroso a nuestro encuentro.” Afirmó Diana Sofía, directora de la fundación Víctimas Visibles.

Escuchar a victimas y victimarios

Grandes experiencias de dolor fueron escuchadas durante la jornada, con vivencias relatadas por victimas y victimarios de algunas zonas de nuestro país, que se hicieron presentes en este encuentro. Sus historias de violencia y muerte, reconciliación y reparación , manifestaron una vez más que al abrir el corazón a Dios, todo es perdonable y que las heridas  por más hondas y graves se pueden sanar a través del verdadero amor, a través de la misericordia.

Los sacerdotes cumplieron su papel dentro del hospital de campo, muchos se revistieron de camilleros decididos a cargar  con el dolor de aquellas persona maltratadas, con heridas, se comprometieron a través de la oración a liberar esas cargas pesados. Otros quisieron convertirse en médicos, para curar y sanar almas. Otros por su parte, decidieron ser enfermeros y auxiliar en todo momento a quien llegue con sufrimientos, con odios, rencores o falta de perdón.

 Veamos a continuación el testimonio de algunos sacerdotes quien participaron en el retiro de la misericordia y su experiencia vivida:

La clausura de este encuentro se realizó con la celebración dela sagrada eucaristía que estuvo presidida por el padre Luis Fernando Restrepo, uno de los cuatro sacerdotes colombianos, incluidos entre los 1.000 sacerdotes designados por el Pontífice Francisco, como "Misioneros de la Misericordia" en este año jubilar.

A continuación los invitamos a escuchar la homilía completa del padre  Luis Fernando Restrepo:

Como acto simbólico, los sacerdotes entregaron también a través de unas cartas todas sus cargas, reconociéndose pecadores como todos los seres humanos y necesitados del amor de Dios y por supuesto de su misericordia.

Finalmente, un nido con el niño Jesús fue donado a cada uno de los participantes como recuerdo del primer amor, como signo de una nueva vida que comienza, a través del verdadero Sí al Señor.