Exitoso preestreno de Las Inocentes

Las inocentes es una película presentada en el Sundance Festival de este año basada en hechos reales ocurridos en Polonia, al finalizar la Segunda Guerra mundial.

Impresiones de los asistentes:

 "Una religiosa sale discretamente de un convento, cruza un campo nevado y llega a la ciudad, donde se deja guiar por niños, a los que pide con desesperación que le indiquen dónde encontrar a un médico que no sea ni polaco ni ruso. En un centro médico de la Cruz Roja (de misión en Polonia, en diciembre de 1945), ella suplica a una joven doctora francesa que la siga. Es cuestión de vida o muerte, pero lo que Mathilde Beaulieu va a descubrir es un asunto mucho más grave y más increíble: la joven se ve obligada a practicar un parto de cesárea, en plena noche y en condiciones precarias, entre paredes desnudas, ornadas de crucifijos, y rodeada por mujeres que han hecho voto de no mostrar nunca sus cuerpos ni dejarse tocar. 

Es en este mundo espiritual en femenino, desgarrado por la violencia de la guerra y sus consecuencias —altamente perturbadoras de la vida monástica—, donde la cineasta francesa Anne Fontaine ha elegido inscribir su 14º largometraje: Las inocentes. Estrenada en el Sundance, en la sección Premieres (una rareza en esta sección dominada por las cintas anglófonas), la película se apoya en un guión apasionante (firmado por Sabrina B. Karine y Alice Vial, adaptado por la directora junto con Pascal Bonitzer), inspirado en hechos reales. Mezclando interés histórico, enjundia metafísica y una imperturbable empatía por estas mujeres que han sido violadas repetidas veces por las tropas soviéticas, que viven sus futuras maternidades en riguroso secreto con tal de evitar un escándalo y el cierre del convento, en un contexto político muy poco favorable a la religión, la trama se desarrolla hábilmente a través de la mirada de Mathilde (la prometedora Lou de Laâge, Shooting Star 2016 de la European Film Promotion).

Extraña en el círculo cerrado del convento desde todos los puntos de vista (nacionalidad, profesión de cirujana, fe puesta en el comunismo), la joven francesa acepta compartir el secreto de las religiosas y toma riesgos para garantizar el seguimiento cotidiano de los embarazos. Una ayuda crucial que anima progresivamente a las hermanas a abrir sus puertas, sus cuerpos y sus espíritus a estos nacimientos, que les devuelven a una condición de mujer que había sido suprimida, de una u otra manera, por la búsqueda de Dios. Pero este nuevo mundo también está marcado por el miedo a la condenación, los efectos traumáticos de las violaciones, las dudas metafísicas, la negación del embarazo, el dolor de los partos, la culpabilidad tanto de quedarse como de separarse de los bebés, etc. En este lugar en el que no es fácil "poner a Dios entre paréntesis durante la consulta", unas mujeres que sufren en lo más hondo del alma la crueldad de la guerra tratan de conservar la esperanza y la fe en medio de una impenetrable oscuridad, atravesada por algunas luces vacilantes.

De estilo clásico y muy dominada visualmente, con una dirección sobria, realzada por el trabajo sutil de Caroline Champetier en la dirección de fotografía, Las inocentes mantiene un buen equilibrio entre un ritmo narrativo que juega con el suspense y el retrato apacible de la cotidianidad religiosa. Surcando suavemente la cresta del tema melodramático, el film pone en primer plano a sus actores (Lou de Laâge, Agata Buzek, Agata Kulesza y Vincent Macaigne) y cumple con eficacia su función de transmisor histórico y feminista, llevando a nuevas cotas de calidad la ya fructífera carrera de Anne Fontaine (de Limpieza en seco a Primavera en Normandía , pasando por Coco, de la rebeldía a la leyenda de Chanel  y Dos madres perfectas )": Cineuropa

Imaagen: fotogramas Cine Colombia)