Bienvenidos a la celebración de la Fiesta de hoy.
Inmediatamente después de la celebración del nacimiento del Niño Jesús, pasamos hoy a celebrar su vida en familia, con esta Fiesta de la Sagrada Familia. Es una fiesta reciente (tiene poco más de un siglo de existencia): fue establecida por el Papa León XIII para dar a las familias cristianas un modelo de vida según el Evangelio.
Nos alegramos por todos los que vienen en familia a la Misa o Eucaristía Dominical.
Con gran, nos disponemos a seguir celebrando juntos esta liturgia de Navidad, cantando este villancico...
El libro del Eclesiástico y el Salmo 128 nos presentan el modelo de relaciones y los valores que prevalecían en la familia tradicional israelita.
En medio de una familia también nació, creció y maduró el Niño Jesús. Y no siempre fue fácil su vida familiar, como muestra el Evangelio de Mateo.
Por eso San Pablo pide que nuestras familias y todas nuestras relaciones se revistan del amor, para poder así superar todas las adversidades.
Escuchemos atentos.
- Por nuestra Iglesia Católica, para que en su interior y en las relaciones con el mundo, manifieste el rostro de verdadera familia de Dios, que acoge, perdona y ama. Oremos.
- Por el Papa, Francisco, por nuestro Arzobispo, Cardenal Rubén, por los ministros ordenados, para que no tengan miedo de anunciar el Evangelio de la vida, la defensa del sacramento del matrimonio, la familia, la defensa de los niños. Oremos.
- Por nuestros gobernantes, para que defiendan a la familia de los ataques de aquellas ideologías que quieren destruirla. Oremos.
- Por las familias lastimadas por la discordia y la incomprensión, por las que viven en situaciones de pobreza, por las que experimentan la enfermedad en seres queridos, por los jóvenes esposos que sufren la imposibilidad de tener hijos, para que toda situación de precariedad y dolor sea visitada por la luz de la fe. Oremos.
- Por los niños que no tienen familia, por los que son rechazados o explotados, para que se desarrollen programas políticos en su defensa y protección. Oremos.
Sergio Pulido Gutiérrez, Mons.
Canónigo de la Catedral y Párroco de San Luis Beltrán