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8-ene.-2025, miécoles después de la Epifanía

"He aquí el primer pan que el Mesías ofrece a la multitud hambrienta y perdida: el pan de la Palabra"

Darte gracias es abrir nuestros ojos y contemplar el día que comienza a nacer, es experimentar alegría y felicidad y deseos de hacer las cosas según tu voluntad. Pero muchas veces sentimos que nuestro optimismo no es fuerte y caemos en debilidades, nos invaden temores y el miedo corre por nuestras venas. Con frecuencia tenemos miedo de afrontar el futuro, de comprometernos a hacer el bien a nuestros hermanos e incluso de tener confianza en nosotros mismos, en nuestras emociones y en nuestras fuerzas positivas. Danos esta palabra de aliento: «ánimo soy yo, no tengan miedo». Fortalécenos en tu amor para que tengamos la seguridad de que no hay nada que temer y de que tú nos amas tal como somos, porque tú eres nuestro Hermano. Gracias, Señor, por darnos la fortaleza necesaria para servir en este día y hacerlo con los dones que de Ti hemos recibido. No permitas que el viento contrario del egoísmo nos impida seguir adelante y, por el contrario, tengamos tu presencia en nuestros corazones. Bendícenos abundantemente y permítenos tener sentimientos de generosidad. Amén. 

Un muy feliz y esperanzador miércoles. 

PALABRAS DEL SANTO PADRE

Dado que Jesús se conmovió al ver a toda aquella gente necesitada de guía y de ayuda, podríamos esperar de Él que obrara algún milagro. Sin embargo, se puso a enseñarles muchas cosas. He aquí el primer pan que el Mesías ofrece a la multitud hambrienta y perdida: el pan de la Palabra. Todos nosotros tenemos necesidad de palabras de verdad que nos guíen y que iluminen nuestro camino. Sin la verdad, que es Cristo mismo, no es posible encontrar la orientación correcta en la vida. Cuando nos alejamos de Jesús y de su amor, nos perdemos y la existencia se transforma en desilusión e insatisfacción. Con Jesús al lado, se puede proceder con seguridad, se pueden superar las pruebas, avanzar en el amor hacia Dios y hacia el prójimo. Jesús se hizo don para los demás, convirtiéndose así en modelo de amor y de servicio para cada uno de nosotros. (Ángelus, 22 de julio de 2018)

Autor:
José Hernando Gómez Ojeda, pbro.