Nuestra Señora del Carmen - Guayabetal

Aunque ya existía desde 1941 como inspección, Guayabetal fue nombrado como municpio el 14 de enero de 1980, segregado de Quetame y parte de Fosca; su primer alcalde fue Manuel Gilberto González. El municpio se encuentra ubicado en la región oriental del departamento de Cundinamarca, sobre la vía que conduce de Bogotá a Villavicencio, y forma parte de los diez municipios que conforman esta región, cuya cabecera regional es Cáqueza. El municipio limita por el norte con Quetame, por el sur y por el oriente con el departamento del Meta, por el occidente con los municipios de Gutiérrez y Fosca. Además de la cabecera municipal de Guayabetal, cuenta con 26 veredas.

Parroquia

La historia de la parroquia se remonta al año 1932, cuando el señor Maximino Segura (cuyos despojos mortales yacen en el templo) viendo la falta de formación en la fe de los pocos habitantes de la región, cede una propiedad a los padres maristas, con el compromiso de esta comunidad de velar por las almas de esta región. De igual manera, adelanta con los vecinos la compra de todo lo necesario para las celebraciones litúrgicas, la construcción de dos enramadas, una para capilla y otra para la casa cural.

Es así, como en el año de 1947, siendo arzobispo de Bogotá, monseñor Ismael Perdomo, pide al padre Besarión Rodríguez, que asuma como vicario cooperador de la parroquia de Quetame, con el territorio asignado de Guayabetal, y él, desde ese momento, comienza a dejar con su ministerio una gran huella en toda la región.

El Presbítero, al ver la necesidad de tener un lugar más adecuado para las celebraciones religiosas se empeñó en la construcción del templo parroquial, organizando para ello un comité con habitantes del municipio para la construcción del templo y de la casa cural. Recolectado el dinero necesario, inició su edificación. La bendición de la primera piedra se efectuó el 7 de enero de 1948.

Así mismo, procedió a solicitar al Arzobispo, que se convirtiera en parroquia de la arquidiócesis de Bogotá; lo cual fue posible mediante el decreto No. 9 del señor arzobispo Ismael Perdomo, del 29 de marzo de 1949, y fue entregada a la Santísima Virgen María, bajo la advocación de Nuestra Señora del Carmen. Su actual párroco es el padre Uriel Hincapié.